jueves, 28 de agosto de 2008



Roman Jakobson


(Moscú, 1896 - Boston, 1982) Lingüista y filólogo ruso. Antes de su graduación (1918) participó en la creación del Círculo Lingüístico de Moscú (1915) y de la Sociedad para el Estudio del Lenguaje Poético de Leningrado ("Opoyaz", 1917), los dos principales centros de difusión del movimiento posteriormente llamado "formalismo ruso", y en estos ámbitos comenzó a ocuparse de los problemas del lenguaje, de la teoría del arte y de sus relaciones.

A principios de los años veinte se trasladó a Praga (en 1923 fue nombrado allí profesor de Filología rusa, y en 1937, en Brno, lo fue de Literatura checa antigua), y publicó los resultados más interesantes de esta primera fase de sus estudios: La nueva poesía rusa, de 1921, y Sobre el verso checo, con particular referencia al verso ruso, de 1923. En estos trabajos, sobre todo en el segundo, ya se afirmaba con claridad su visión de la poesía como un sistema lingüístico dominado por leyes específicas propias, en las que se confronta siempre una distinción entre elementos significativos y no significativos, y también el aprovechamiento de éstos con fines poéticos.

El interés por los fenómenos literarios será una constante de los estudios de Jakobson: en sus Observaciones sobre la prosa del poeta Pasternak, de 1935, destacó (posteriormente volvió a tratar estos temas en sus estudios sobre afasia) la relación global y dialéctica entre "metáfora" (similitud) y "metonimia" (contigüidad), dos directrices opuestas y complementarias, fundadas en la bipolaridad del propio lenguaje, y en 1942 se ocupó de la poética en Versos desconocidos de Maiakovski.

En Closing statements: Linguistics and Poetics (1958) definió seis funciones del lenguaje, basándose en los factores constitutivos de cada proceso lingüístico: función "referencial", orientada al contexto, "emotiva" al emisor, "connotativa" al receptor, "fáctica" al contacto, "metalingüística" al código y "poética" al mensaje. La Poética, como estudio de dicha función, debe considerarse parte integrante de la Lingüística. Ya en Praga, Jakobson había comenzado a interesarse por la fonología. En 1926 estuvo entre los fundadores del Círculo Lingüístico de Praga; en 1928 participó en el Primer Congreso Internacional de Lingüística en La Haya, donde presentó un programa general de lingüística funcional y estructural, elaborado junto a Karcevski y Trubeskoi, con particular atención a la fonología, y que daba la primera demostración analítica de la existencia de sistemas fonemáticos.

La originalidad de esta postura reside en la reconducción de los fonemas, hasta entonces considerados de forma atomizada, a un principio fonético en el cual puedan definirse a través de sus trazos distintivos. En diferentes trabajos, entre los que se encuentran las aportaciones al cuarto y al sexto Congreso Internacional de Lingüística (Copenhague, en 1936, y París, en 1948) desarrolló esta teoría hasta llegar a los últimos manuales generales: Preliminaries to Speech Analysis (con C. Fant y M. Halle, 152) y Fundamentos del lenguaje (con M. Halle, 1956).
Jakobson intentó, además, extender al concepto de oposición binaria a otros aspectos del lenguaje, partiendo de dos estudios de morfología estructural Zur Struktur des russischen Verbums (1932) y Beitrag zur allgemeinen kasuslehre (1936), y por ello fue de los primeros y de los pocos que se ocuparon de fonología diacrónica en Remarques sur l'évolution phonologique du russe comparée à celle des centres langues eslaves (1929) y Prinzipien der historischen Phonologie (1931).

En 1939, después de la ocupación nazi de Checoslovaquia, se trasladó a Escandinavia: allí publicó Kindersprache, Aphasie und allgemeine Lautgesetze (1941), donde enmarcaba sus teorías dentro de una consideración unitaria del ritmo de la adquisición y la pérdida del lenguaje. En 1941 viajó a Estados Unidos, donde, por fin, se estableció. Impartió sus enseñanzas primero en Nueva York, en L'École Libre des Hautes Études y en la Universidad de Columbia, y más tarde entre 1947 y 1957 en Harvard y en el Massachusetts Institute of Technology, donde finalmente se quedó.
Entre sus más de setecientas obras, la principal recopilación es Selected Writings, en ocho volúmenes. En 1963 se publicó en París, una antología de sus Ensayos de Lingüística General, que permite captar la intención general de sus estudios y la diversidad de sus intereses. Otros artículos de 1956 y 1957 se encuentran recogidos en El desarrollo de la semiótica.

FUNCIONES DEL LENGUAJE

1. FUNCIÓN REPRESENTATIVA

Denominada también función referencial, cognitiva o informativa.
Esta función es fundamental en la comunicación lingüística y está presente en todos aquellos enunciados que dan cuenta de la realidad, de los objetos del universo.

La función representativa consiste en ese “decir algo sobre las cosas”, en hacer referencia por medio del lenguaje al mundo de los objetos y de sus relaciones. Cuando el lenguaje tiene por objeto primordial suministrar información sobre algo, estamos frente a la fucion representativa
Es decir, Se usa cuando pretendemos meramente transmitir una información, sin hacer valoraciones sobre ella ni pretender reacciones en nuestro interlocutor, por ejemplo cuando decimos “está lloviendo”, o “la capital de Marruecos es Rabat”. Esta función se centra, dentro de los elementos de la comunicación, en el mensaje, aunque también hay quien dice que se centra en la realidad exterior o referente .

2. FUNCIÓN EXPRESIVA

Llamada también función emotiva o sintomática.
Es utilizada cuando el emisor (elemento en el que se centra esta función) pretende dar cuenta de su estado físico o anímico, como cuando soltamos un “¡ay!” al pillarnos la lengua con la tapa del piano, cuando decimos a nuestra novia que la echamos de menos o cuando decimos que odiamos las espinacas

Esta función le permite al emisor la exteriorización de sus actitudes, de sus sentimientos y estados de ánimo, así como la de sus deseos, voluntades, nivel socioeconómino y el grado de interés o de apasionamiento con que realiza determinada comunicación.

Esta función se cumple, por consiguiente, cuando el mensaje esta centrado en el emisor.
Es bueno aclarar que la expresividad no se da aparte de lo representativo, sino que es una función del lenguaje que permite una proyección del sujeto de la enunciación pero con base en una representatividad. Así, en expresiones corrientes como “esa mujer me fascina “o ¡qué mañana tan hermosa!, predomina, sin duda, la función expresiva, pero con un soporte de representación simbólica dado por la alusión a unos referentes.

Para concluir, observemos que la función expresiva o emotiva se manifiesta gracias a los significados afectivos o connotativos que se establecen sobre la base de los significados denotativos : cuando hablamos, expresamos nuestro estado de ánimo, nuestras actitudes o nuestra pertenencia a un grupo social, damos información sobre nosotros mismos, exteriorizamos síntomas, aunque no tengamos siempre plena conciencia de ello.

3. FUNCIÓN APELATIVA

Es importante aclarar primero que Bühler entiende la apelación como la propiedad de influir por medio de las palabras en las actitudes, pensamientos y conducta del interlocutor.
Pues bien, estamos en presencia de la función apelativa o conativa cuando el mensaje está dirigido al oyente en forma de orden, mandato, exhortación, requerimiento o, simplemente, con el propósito de llamar su atención.

Es indudable que la forma como nos expresamos condiciona al oyente: “¿No quieres ir a cine conmigo ?”, “ te suplico, por favor, que no regreses ” ,
“quédate en tu habitación ”, “ Señor, permítame su licencia de conducción ” , y muchas otras expresiones del lenguaje cotidiano que tienen este carácter interactivo, evidencian esta función.

El vocativo y el imperativo son las formas gramaticales que expresan de una manera más directa la función apelativa: “Fernando, la existencia humana ha sido en toda época y momento un juego peligroso ”, “ Siéntate al sol ” .
Otros autores incluyen también dentro de esta función la normativa (reglamentos, leyes), la interaccional (cartas, invitaciones), la instrumental (recetas, manuales), la heurística (cuestionarios, encuestas) y la dramática (obras de teatro).

Función conativa. Mediante el uso de esta función normalmente pretendemos provocar una reacción en el receptor, que es el elemento fundamental aquí. Es decir, queremos que haga algo, o que deje de hacerlo. Es la función principal cuando, por ejemplo, decimos “vete a tomar el aire”, “abre la ventana, por favor” o “cállate”.

4. FUNCION POÉTICA

Esta función determina las relaciones del mensaje consigo mismo, y se presenta cuando todos los elementos del código lingüístico se concentran en el mensaje. El mensaje recibe una construcción especial por medio de procedimientos retóricos, estilísticos, semióticos, de selección, que tienen como propósito convertirlo en un objeto estético; tal como sucede, por ejemplo, en un poema o en un texto literario :

“Hermano de las nubes
yo soy.
Hermano de las nubes,
de las errantes nubes, de las ilusas del espacio :
vagarosos navíos
que empujan acres soplos anónimos y fríos,
que impelen recios ímpetus voltarios y sombríos.
Viajero de las noches
yo soy.
Viajero de las noches embriagadoras ; nauta
de sus golfos ilímites...

LEÓN DE GREIFF

Función poética o estética. Se pretende crear belleza usando el lenguaje. Es la función principal en poemas, novelas, obras de teatro y canciones. También es una de las principales funciones en los refranes. Esta función, al igual que la representativa, se centra en el mensaje, pero al contrario que ella, en su forma y no en su contenido. Cualquier poema es un ejemplo de la función estética del lenguaje.

Por ejemplo: “Y yo me la llevé al río, / creyendo que era mozuela, / pero tenía marido.” (Federico García Lorca).Sin embargo, como lo advierte Jakobson, “cualquier tentativa de reducir la esfera de la función poética a la poesía o de confinar la poesía a la función poética sería una tremenda simplificación engañosa. La función poética no es la única función del arte verbal, sino su función dominante, mientras que en todas las demás actividades verbales actúa como constitutivo subsidiario, accesorio. De ahí que, al estudiar la función poética, la lingüística no pueda limitarse al campo de la poesía.

5. FUNCIÓN FÁTICA

Es la función que cumple el lenguaje cuando tiene como objetivo establecer y mantener el contacto comunicativo. Siempre recurrimos, de una u otra manera, a expresiones cuya finalidad es, en términos del mismo Jakobson, “ establecer, prolongar o interrumpir la comunicación, para cerciorarse de que el canal de comunicación funciona, para llamar la atención del interlocutor o confirmar si su atención se mantiene”.

Tal es el caso de expresiones como “hola”, “aló”, “¿qué hay ?”, “¿cómo te ha ido ?”, “en fin”, “sí, claro”, “bueno”, “pues sí”, etc.

“ – Bueno – dijo el joven.
-- Bueno – dijo ella.
-- ¡ Bueno !, ya estamos – dijo él.
-- Ya estamos – dijo ella --, ¿verdad ?
-- Eso creo – dijo él -- ¡Hala, ya estamos !
-- Bueno – dijo ella.
-- Bueno – dijo él --, bueno”.
DOROTHY PARKER

No importa tanto el contenido de lo que se dice como el hecho mismo de estar en contacto con el otro, de hacerle sentir nuestra propia presencia. Esta función es evidente cuando se intercambian saludos, fórmulas de cortesía, etc.

Entonces, la función fática o de contacto tiene como finalidad precisamente poner en contacto comunicativo a los interlocutores, situarlos en el diálogo para que, abierto ya el canal, puedan desarrollar el asunto concreto que deseen.

Es interesante anotar que algunos autores le atribuyen al lenguaje propiedades sustitutivas del tacto, de las caricias, etc. Es decir, el lenguaje llega a convertirse, en ocasiones, en un suave roce, en una delicada caricia, en un tierno o amoroso abrazo ; cuando no, en un brutal golpe, en una airada bofetada o en un violento empujón. Esta función lo confirma.

Función fática. La usamos para comprobar que el canal (elemento fundamental) sigue abierto, es decir, que la comunicación es físicamente posible. Por ejemplo, cuando hablando por el móvil preguntamos si nos oyen, o cuando usamos coletillas. Ejemplos de coletillas, en cursiva: “Te quedas ahí quieto, ¿eh?“; “ayer lo pasé genial en la fiesta, ¿sabes?“.

6. FUNCIÓN METALINGÜÍSTICA

Toda ciencia tiene un objeto de estudio bien definido y necesariamente utiliza una lengua para referirse a él. Por ejemplo, la astronomía tiene como objeto de estudio la posición, el movimiento y la constitución de los cuerpos celestes. Para referirse a ellos utiliza la lengua, lógicamente haciendo uso de términos técnicos. En este sentido, la lengua es un instrumento para la astronomía.

Pues bien, la lingüística tiene como objeto de estudio la lengua, y para referirse a ese objeto de estudio también utiliza la lengua como instrumento. Esto es posible gracias a la propiedad reflexiva del lenguaje : el lenguaje puede ser ámbito de referencia de sí mismo, puede utilizarse reflexivamente dando lugar a un metalenguaje

Función metalingüística. Se utiliza cuando se usa la lengua para hablar de la misma lengua u otra cualquiera. Por ejemplo, cuando decimos “burro se escribe con b”, o “the es el artículo en inglés”. Esta función se centra en el código, es decir, en la lengua respectiva de la que se hable



BIBLIOGRAFIA
http://www.biografiasyvidas.com/biografia/j/jakobson.htm
http://lenguai17curso0708.nireblog.com/post/2007/10/17/las-funciones-del-lenguaje-segun-roman-jakobson
docencia.udea.edu.co/LenguaMaterna/Documentos/UNIDAD%2011


UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE QUERETARO.

FACULTAD DE CIENCIAS POLÍTICAS Y SOCIALES.

COMUNICACIÓN Y PERIODISMO

5° SEMESTRE.

LOYOLA RAMÍREZ CLAUDIA JANNETTE.

SEMIÓTICA.

PROFESOR: ALFREDO FLORES ORTA

28/AGOSTO/08.




Roman Jakobson



(Moscú, 1896 - Boston, 1982) Lingüista y filólogo ruso. Antes de su graduación (1918) participó en la creación del Círculo Lingüístico de Moscú (1915) y de la Sociedad para el Estudio del Lenguaje Poético de Leningrado ("Opoyaz", 1917), los dos principales centros de difusión del movimiento posteriormente llamado "formalismo ruso", y en estos ámbitos comenzó a ocuparse de los problemas del lenguaje, de la teoría del arte y de sus relaciones.
A principios de los años veinte se trasladó a Praga (en 1923 fue nombrado allí profesor de Filología rusa, y en 1937, en Brno, lo fue de Literatura checa antigua), y publicó los resultados más interesantes de esta primera fase de sus estudios: La nueva poesía rusa, de 1921, y Sobre el verso checo, con particular referencia al verso ruso, de 1923. En estos trabajos, sobre todo en el segundo, ya se afirmaba con claridad su visión de la poesía como un sistema lingüístico dominado por leyes específicas propias, en las que se confronta siempre una distinción entre elementos significativos y no significativos, y también el aprovechamiento de éstos con fines poéticos.
El interés por los fenómenos literarios será una constante de los estudios de Jakobson: en sus Observaciones sobre la prosa del poeta Pasternak, de 1935, destacó (posteriormente volvió a tratar estos temas en sus estudios sobre afasia) la relación global y dialéctica entre "metáfora" (similitud) y "metonimia" (contigüidad), dos directrices opuestas y complementarias, fundadas en la bipolaridad del propio lenguaje, y en 1942 se ocupó de la poética en Versos desconocidos de Maiakovski.
En Closing statements: Linguistics and Poetics (1958) definió seis funciones del lenguaje, basándose en los factores constitutivos de cada proceso lingüístico: función "referencial", orientada al contexto, "emotiva" al emisor, "connotativa" al receptor, "fáctica" al contacto, "metalingüística" al código y "poética" al mensaje. La Poética, como estudio de dicha función, debe considerarse parte integrante de la Lingüística. Ya en Praga, Jakobson había comenzado a interesarse por la fonología. En 1926 estuvo entre los fundadores del Círculo Lingüístico de Praga; en 1928 participó en el Primer Congreso Internacional de Lingüística en La Haya, donde presentó un programa general de lingüística funcional y estructural, elaborado junto a Karcevski y Trubeskoi, con particular atención a la fonología, y que daba la primera demostración analítica de la existencia de sistemas fonemáticos.
La originalidad de esta postura reside en la reconducción de los fonemas, hasta entonces considerados de forma atomizada, a un principio fonético en el cual puedan definirse a través de sus trazos distintivos. En diferentes trabajos, entre los que se encuentran las aportaciones al cuarto y al sexto Congreso Internacional de Lingüística (Copenhague, en 1936, y París, en 1948) desarrolló esta teoría hasta llegar a los últimos manuales generales: Preliminaries to Speech Analysis (con C. Fant y M. Halle, 152) y Fundamentos del lenguaje (con M. Halle, 1956).
Jakobson intentó, además, extender al concepto de oposición binaria a otros aspectos del lenguaje, partiendo de dos estudios de morfología estructural Zur Struktur des russischen Verbums (1932) y Beitrag zur allgemeinen kasuslehre (1936), y por ello fue de los primeros y de los pocos que se ocuparon de fonología diacrónica en Remarques sur l'évolution phonologique du russe comparée à celle des centres langues eslaves (1929) y Prinzipien der historischen Phonologie (1931).
En 1939, después de la ocupación nazi de Checoslovaquia, se trasladó a Escandinavia: allí publicó Kindersprache, Aphasie und allgemeine Lautgesetze (1941), donde enmarcaba sus teorías dentro de una consideración unitaria del ritmo de la adquisición y la pérdida del lenguaje. En 1941 viajó a Estados Unidos, donde, por fin, se estableció. Impartió sus enseñanzas primero en Nueva York, en L'École Libre des Hautes Études y en la Universidad de Columbia, y más tarde entre 1947 y 1957 en Harvard y en el Massachusetts Institute of Technology, donde finalmente se quedó.
Entre sus más de setecientas obras, la principal recopilación es Selected Writings, en ocho volúmenes. En 1963 se publicó en París, una antología de sus Ensayos de Lingüística General, que permite captar la intención general de sus estudios y la diversidad de sus intereses. Otros artículos de 1956 y 1957 se encuentran recogidos en El desarrollo de la semiótica.
FUNCIONES DEL LENGUAJE
1. FUNCIÓN REPRESENTATIVA
2. :
Denominada también función referencial, cognitiva o informativa.
Esta función es fundamental en la comunicación lingüística y está presente en todos aquellos enunciados que dan cuenta de la realidad, de los objetos del universo.
La función representativa consiste en ese “decir algo sobre las cosas”, en hacer referencia por medio del lenguaje al mundo de los objetos y de sus relaciones. Cuando el lenguaje tiene por objeto primordial suministrar información sobre algo, estamos frente a la fucion representativa
Es decir, Se usa cuando pretendemos meramente transmitir una información, sin hacer valoraciones sobre ella ni pretender reacciones en nuestro interlocutor, por ejemplo cuando decimos “está lloviendo”, o “la capital de Marruecos es Rabat”. Esta función se centra, dentro de los elementos de la comunicación, en el mensaje, aunque también hay quien dice que se centra en la realidad exterior o referente .
3. FUNCIÓN EXPRESIVA
Llamada también función emotiva o sintomática.
Es utilizada cuando el emisor (elemento en el que se centra esta función) pretende dar cuenta de su estado físico o anímico, como cuando soltamos un “¡ay!” al pillarnos la lengua con la tapa del piano, cuando decimos a nuestra novia que la echamos de menos o cuando decimos que odiamos las espinacas

Esta función le permite al emisor la exteriorización de sus actitudes, de sus sentimientos y estados de ánimo, así como la de sus deseos, voluntades, nivel socioeconómino y el grado de interés o de apasionamiento con que realiza determinada comunicación.
Esta función se cumple, por consiguiente, cuando el mensaje esta centrado en el emisor.
Es bueno aclarar que la expresividad no se da aparte de lo representativo, sino que es una función del lenguaje que permite una proyección del sujeto de la enunciación pero con base en una representatividad. Así, en expresiones corrientes como “esa mujer me fascina “o ¡qué mañana tan hermosa!, predomina, sin duda, la función expresiva, pero con un soporte de representación simbólica dado por la alusión a unos referentes.
Para concluir, observemos que la función expresiva o emotiva se manifiesta gracias a los significados afectivos o connotativos que se establecen sobre la base de los significados denotativos : cuando hablamos, expresamos nuestro estado de ánimo, nuestras actitudes o nuestra pertenencia a un grupo social, damos información sobre nosotros mismos, exteriorizamos síntomas, aunque no tengamos siempre plena conciencia de ello.

3. FUNCIÓN APELATIVA

Es importante aclarar primero que Bühler entiende la apelación como la propiedad de influir por medio de las palabras en las actitudes, pensamientos y conducta del interlocutor.
Pues bien, estamos en presencia de la función apelativa o conativa cuando el mensaje está dirigido al oyente en forma de orden, mandato, exhortación, requerimiento o, simplemente, con el propósito de llamar su atención.
Es indudable que la forma como nos expresamos condiciona al oyente: “¿No quieres ir a cine conmigo ?”, “ te suplico, por favor, que no regreses ” ,
“quédate en tu habitación ”, “ Señor, permítame su licencia de conducción ” , y muchas otras expresiones del lenguaje cotidiano que tienen este carácter interactivo, evidencian esta función.
El vocativo[1] y el imperativo son las formas gramaticales que expresan de una manera más directa la función apelativa: “Fernando, la existencia humana ha sido en toda época y momento un juego peligroso ”, “ Siéntate al sol ” .
Otros autores incluyen también dentro de esta función la normativa (reglamentos, leyes), la interaccional (cartas, invitaciones), la instrumental (recetas, manuales), la heurística (cuestionarios, encuestas) y la dramática (obras de teatro)
Función conativa. Mediante el uso de esta función normalmente pretendemos provocar una reacción en el receptor, que es el elemento fundamental aquí. Es decir, queremos que haga algo, o que deje de hacerlo. Es la función principal cuando, por ejemplo, decimos “vete a tomar el aire”, “abre la ventana, por favor” o “cállate”.
4. FUNCION POÉTICA

Esta función determina las relaciones del mensaje consigo mismo, y se presenta cuando todos los elementos del código lingüístico se concentran en el mensaje. El mensaje recibe una construcción especial por medio de procedimientos retóricos, estilísticos, semióticos, de selección, que tienen como propósito convertirlo en un objeto estético; tal como sucede, por ejemplo, en un poema o en un texto literario :
“Hermano de las nubes
yo soy.
Hermano de las nubes,
de las errantes nubes, de las ilusas del espacio :
vagarosos navíos
que empujan acres soplos anónimos y fríos,
que impelen recios ímpetus voltarios y sombríos.
Viajero de las noches
yo soy.
Viajero de las noches embriagadoras ; nauta
de sus golfos ilímites...

LEÓN DE GREIFF

Función poética o estética. Se pretende crear belleza usando el lenguaje. Es la función principal en poemas, novelas, obras de teatro y canciones. También es una de las principales funciones en los refranes. Esta función, al igual que la representativa, se centra en el mensaje, pero al contrario que ella, en su forma y no en su contenido. Cualquier poema es un ejemplo de la función estética del lenguaje.
Por ejemplo: “Y yo me la llevé al río, / creyendo que era mozuela, / pero tenía marido.” (Federico García Lorca)
Sin embargo, como lo advierte Jakobson, “cualquier tentativa de reducir la esfera de la función poética a la poesía o de confinar la poesía a la función poética sería una tremenda simplificación engañosa. La función poética no es la única función del arte verbal, sino su función dominante, mientras que en todas las demás actividades verbales actúa como constitutivo subsidiario, accesorio. De ahí que, al estudiar la función poética, la lingüística no pueda limitarse al campo de la poesía.

5. FUNCIÓN FÁTICA
6.
Es la función que cumple el lenguaje cuando tiene como objetivo establecer y mantener el contacto comunicativo. Siempre recurrimos, de una u otra manera, a expresiones cuya finalidad es, en términos del mismo Jakobson, “ establecer, prolongar o interrumpir la comunicación, para cerciorarse de que el canal de comunicación funciona, para llamar la atención del interlocutor o confirmar si su atención se mantiene”.

Tal es el caso de expresiones como “hola”, “aló”, “¿qué hay ?”, “¿cómo te ha ido ?”, “en fin”, “sí, claro”, “bueno”, “pues sí”, etc.

“ – Bueno – dijo el joven.
-- Bueno – dijo ella.
-- ¡ Bueno !, ya estamos – dijo él.
-- Ya estamos – dijo ella --, ¿verdad ?
-- Eso creo – dijo él -- ¡Hala, ya estamos !
-- Bueno – dijo ella.
-- Bueno – dijo él --, bueno”.

DOROTHY PARKER

No importa tanto el contenido de lo que se dice como el hecho mismo de estar en contacto con el otro, de hacerle sentir nuestra propia presencia. Esta función es evidente cuando se intercambian saludos, fórmulas de cortesía, etc.
Entonces, la función fática o de contacto tiene como finalidad precisamente poner en contacto comunicativo a los interlocutores, situarlos en el diálogo para que, abierto ya el canal, puedan desarrollar el asunto concreto que deseen.
Es interesante anotar que algunos autores le atribuyen al lenguaje propiedades sustitutivas del tacto, de las caricias, etc. Es decir, el lenguaje llega a convertirse, en ocasiones, en un suave roce, en una delicada caricia, en un tierno o amoroso abrazo ; cuando no, en un brutal golpe, en una airada bofetada o en un violento empujón. Esta función lo confirma.
Función fática. La usamos para comprobar que el canal (elemento fundamental) sigue abierto, es decir, que la comunicación es físicamente posible. Por ejemplo, cuando hablando por el móvil preguntamos si nos oyen, o cuando usamos coletillas. Ejemplos de coletillas, en cursiva: “Te quedas ahí quieto, ¿eh?“; “ayer lo pasé genial en la fiesta, ¿sabes?“.

6. FUNCIÓN METALINGÜÍSTICA

Toda ciencia tiene un objeto de estudio bien definido y necesariamente utiliza una lengua para referirse a él. Por ejemplo, la astronomía tiene como objeto de estudio la posición, el movimiento y la constitución de los cuerpos celestes. Para referirse a ellos utiliza la lengua, lógicamente haciendo uso de términos técnicos. En este sentido, la lengua es un instrumento para la astronomía.
Pues bien, la lingüística tiene como objeto de estudio la lengua, y para referirse a ese objeto de estudio también utiliza la lengua como instrumento. Esto es posible gracias a la propiedad reflexiva del lenguaje : el lenguaje puede ser ámbito de referencia de sí mismo, puede utilizarse reflexivamente dando lugar a un metalenguaje
Función metalingüística. Se utiliza cuando se usa la lengua para hablar de la misma lengua u otra cualquiera. Por ejemplo, cuando decimos “burro se escribe con b”, o “the es el artículo en inglés”. Esta función se centra en el código, es decir, en la lengua respectiva de la que se hable



BIBLIOGRAFIA
http://www.biografiasyvidas.com/biografia/j/jakobson.htm
http://lenguai17curso0708.nireblog.com/post/2007/10/17/las-funciones-del-lenguaje-segun-roman-jakobson
docencia.udea.edu.co/LenguaMaterna/Documentos/UNIDAD%2011


UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE QUERETARO.

FACULTAD DE CIENCIAS POLÍTICAS Y SOCIALES.

COMUNICACIÓN Y PERIODISMO

5° SEMESTRE.

LOYOLA RAMÍREZ CLAUDIA JANNETTE.


SEMIÓTICA.

PROFESOR: ALFREDO FLORES ORTA

28/AGOSTO/08.

jueves, 21 de agosto de 2008

UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE QUERETARO.

FACULTAD DE CIENCIAS POLÍTICAS Y SOCIALES.

COMUNICACIÓN Y PERIODISMO

5° SEMESTRE.

MARTÍNEZ CHÁVEZ SILVIA ANDREA
LOYOLA RAMÍREZ CLAUDIA JANNETTE.

“ANÁLISIS DE UN ANUNCIO COMERCIAL: CLOREST FRESH.”
SEMIÓTICA.

PROFESOR: ALFREDO FLORES ORTA

21/AGOSTO/08.





ANÁLISIS DE UN ANUNCIO COMERCIAL: CLOREST FRESH.

Emisor: El hombre vestido con una camisa negra y un pantalón de vestir, también y el mismo producto al provocar una reacción en este hombre y dar a conocer su característica principal: aliento fresco.
Producto qué promueve: Clorest Fresh.
Perfil del usuario: el anuncio va dirigido a todo tipo de clase socioeconómico desde la alta hasta le media baja, pues se conjugan elementos como un ventilador antiguo, un sillón moderno y una mesa pequeña, a los cuales les encontramos significados de clases sociales, pues cada uno puede representar a la alta, media y clase media baja; el ambiente tiene poca luz lo cual hace de esto sobrio.
Para entender mejor el concepto de nivel socioeconómico hay que contestar a la pregunta ¿Qué es?
El índice de Nivel Socio Económico se basa en los siguientes indicadores:
• Nivel Educacional del Principal Sostén del Hogar (indicador de mayor importancia)
• Nivel Ocupacional del Principal Sostén del Hogar.
• Patrimonio del Hogar (Posesión de bienes y de automóvil)
Dimensión SOCIAL: Se expresa en la variable de la Educación del principal sostén del hogar(El miembro del hogar que más aporta al presupuesto y la economía familiar a través de su ocupación principal, aunque no es necesariamente quien percibe el mayor ingreso).
Dimensión ECONOMICA: Se expresa en la ocupación del principal sostén del hogar y en el patrimonio del hogar: bienes (T.V. color con control remoto, teléfono, heladera con freezer, videograbador/reproductor, secarropas, lavarropas programable automático, tarjeta de crédito del principal sostén del hogar, computadora personal, acondicionador de aire, freezer independiente) y automóvil. [1]
Por lo que analizando cada uno de los detalles podemos definir a que clase social se pertenece.
La edad que prevalece es desde jóvenes hasta edad adulta, en un rango de 14 a 35 años de edad.
La región que da a mostrar es en una ciudad y a la vez también de una zona rural. Eso lo sabemos por la ropa que usa y el lugar que conjuga los elementos antes mencionados (un ventilador antiguo, un sillón moderno y una mesa pequeña) son de una ciudad urbanizada, pero también como sólo son tres elementos que toda clase social tiene, esto hace referencia a un lugar donde se tienen pocos objetos en casa como es la situación, en su mayoría, de una zona rural.
El prospecto del hombre que presenta el producto, el cual viste de forma elegante y formal, nos da a entender que, precisamente, va dirigido para un público joven y maduro que desee sentirse bien consigo mismo, que busque un aliento fresco y que al mismo tiempo este le haga sentir seguridad o sentirse seguro de sí mismo.
También hay frases publicitarias: “Sin azúcar” que determina que no engorda, pues la gente piensa que la azúcar lo hace. Otro es “Come bien” y “Contiene Fenilalanina”. Esta última frase publicitaria es muy importante pues: “La fenilalanina existe en forma de dos enantiómeros, la forma D- y la L-, dependiendo de su organización espacial. La forma que se encuentra en las proteínas es la L-fenilalanina (LFA), y además es uno de los nueve aminoácidos esenciales para humanos (esencial significa que no es sintetizado por las células humanas, y por tanto debe ingerirse con la dieta)”[2], por lo que analizando a fondo qué es la fenilalanina sabemos un dato más y que es importante, va dirigido también para personas vanidosas que cuidan su físico.
Dentro del anuncio existen signos, tanto simbólicos como icónicos.
Para iniciar hay que definir que un signo es una realidad perceptible por uno o varios sentidos humanos que remite a otra realidad que no esta presente. Consta de un significante, un significado y un referente produciéndose una relación inseparable entre ellos denominada significación.[3]
Ya comprendido qué es un signo, pasamos a que el signo icónico poseé alguna semejanza o analogía con su referente.[4]
En el comercial el signo icónico que se presenta es la presentación del producto en manos del hombre, tanto en su empaque, como el chicle solo cuando está apunto de ser comido.
Los signos simbólicos son arbitrarios, cuya relación con el objeto se basa exclusivamente en una convención. Son objetos materiales que representan ideas abstractas.[5]
En el anuncio el signo simbólico es el color verde en la mancha que explota de la boca del hombre, que representa la frescura.
Un código es el conjunto de algo que pueda ser entendido por el emisor y el receptor. El código que se ha usado en este texto, por ejemplo, es la lengua española o el castellano.[6]
El lenguaje corporal, o código corporal, es aquella señal o conjunto de señales no verbales que indican nuestra personalidad, sentimientos, actitudes y estados de ánimo.
El estudio del lenguaje corporal abarca todos los movimientos del cuerpo humano. Desde los más deliberados como besar, estrechar la mano, dar una bofetada, mirada... hasta los totalmente inconscientes: abrir los ojos o la boca por sorpresa o miedo, levantar los hombros cuando no sabemos algo... El lenguaje corporal es en parte instintivo y en parte aprendido e imitativo.[7]
En el anuncio publicitario el código primordial es el corporal pues se presenta un acercamiento del hombre con el producto, al momento de probarlo, además los gestos y los movimientos del cuerpo del hombre implícitamente nos dicen que disfruta y goza el chicle clorets fresch.
Otro código que se ve es el de valor por la vestimenta que usa el hombre. Para definir porque este es considerado un código de valor es importante saber que la moda entra dentro de este rubro e indica una elección realizada en función de unos criterios de gusto.
Según la RAE (Real Academia Española), la moda se refiere al "Uso, modo o costumbre que está en alza durante algún tiempo, ó en determinado país, con especialidad en los trajes, telas y adornos, sobre todo los recién introducidos."
Según el marketing la moda es lo actual, o lo que está en vigor e interesa a una mayoría en un momento determinado. Sin embargo, en ocasiones, aplicada al diseño y en especial a la indumentaria es aquel atuendo, estilo, prenda, color o complemento, que se lleva por parte del grupo socialmente más importante o hegemónico o exclusivo, que es el capaz de influir en los demás. [8]
Y aquí la vestimenta es muy importante pues nos da a conocer hacia quienes va dirigido el comercial, nos da rango de edad y nivel socioeconómico, también.
El código usado, como el Código de valor, fue adecuado para el tipo de comercial que se realizó, ya que nos presenta a un hombre vestido formalmente y le da una cierta peculiaridad que lo hace más serio, por consiguiente, el Código corporal, en el que se realizan movimientos sutiles, atractivos y sobre todo disfrutables, como el movimiento de la boca al masticar y la mirada, es muy llamativo y atañe la vista de todos los televidentes atrapándolos.
Consideramos que más que algo formal pudo haber sido más divertido, como una fiesta en la playa o un departamento con amigos, los cuales están disfrutando de esta y se encuentran bailando, y de repente, para refrescarse que más que un Clorets Fresh.
Los códigos usados fueron correctos pero en nuestra opinión, el de valor, pudo ser más casual: unos jeens y una playera, y el código corporal nos gustó aunque nos hubiera gustado que agregaran a una chica, y esto podría ser más atractivo; ver que goza ella también del producto, que se acerca y el hombre le ofrece un chicle, así ambos se refrescan y disfrutan, y al final, él le da un beso con aliento fresco, lo que implica esa seguridad que mencionamos en párrafos arriba.
En realidad esos son los posibles cambios que haríamos las dos, claro si va dirigido para adolescentes y universitarios, que fue en lo que pensamos. Si el mensaje es para personas con las características que definimos anteriormente entonces está sólo hubiéramos agregado a una mujer y al final el beso.


[1] http://ar.answers.yahoo.com/question/index?qid=20061115135339AAbQzHy

[2] http://es.wikipedia.org/wiki/Fenilalanina
[3] http://es.wikipedia.org/wiki/Signo_ling%C3%BC%C3%ADstico
[4] http://www.fotonostra.com/grafico/signosiconicos.html
[5] http://www.fotonostra.com/grafico/tiposdesignos.htm
[6] http://es.wikipedia.org/wiki/C%C3%B3digo
[7] http://cprcalat.educa.aragon.es/jornadasef/elmimo.htm
[8] http://es.wikipedia.org/wiki/Moda